El poder de los pequeños cambios

el poder de los pequeños cambios

Una idea ancestral nos dice que si cambias una cosa de lugar automáticamente se generará un cambio de energía, y con ella, te verás obligada, sin ser consciente de ello, a hacer más cambios hasta que, sin darte cuenta, habrás construido algo nuevo.

Bien, pues aquí está la raíz de la evolución. Como en todo, desde la visión cósmica del universo, hasta el hecho más intrascendente que pueda pasarnos en, nuestro pequeño mundo, el hogar, podremos observar:

EL PODER DE LOS PEQUEÑOS CAMBIOS

Sobre las tareas del hogar sé, por experiencia, que son ingratas cuando las vemos como algo pesado y aburrido. Pero, sin ninguna duda, son necesarias para nuestro bienestar. Por tanto, mejor verlas cómo algo útil, algo, que nos proporciona una gran recompensa a medio largo plazo.

Así que, del mismo modo que cuidamos nuestro cuerpo, o la imagen que proyectamos, también necesitamos cuidar de nuestra casa, para que ella, nos dé protección, calme nuestros miedos, y nos ayude a encontrar la paz interior que tanto necesitamos.

El hecho de tener una casa, donde crear nuestro hogar, nos ha dado la posibilidad, a los humanos, de poder subir de nivel en la escala del desarrollo personal.

Pasamos de tener una vida ruda en la cueva, a tener las casas de hoy, llenas de comodidades que nos hacen la vida más fácil y agradable, la evolución ha ido a la par. Hoy con solo un clic, o con la misma voz, damos órdenes para conseguir con éxito un resultado y todo ello, sin tener que hacer ni un esfuerzo de más.

Pero en contra, la misma evolución nos ha llenado de cosas nuestras casas. Cosas que guardamos y amontonamos. En una estadística reciente de NAPO, se cuenta que solo un 5% de personas no tienen el hábito de la acumulación. Sugerente ¿verdad?

Para generar el cambio mental:

Vamos a empezar por crear en nuestra mente el ambiente propicio para generar el cambio dentro del hogar, así poco a poco, superar la acumulación

Empezaremos por observar con ojos muy críticos cada rincón de nuestra casa.

Analizarás, espacio por espacio. Por ejemplo, encimeras, estantes, mesitas. Sin olvidarte del área, que observas, dormitorio, aseo, cocina… Toma nota de todo aquello que necesite un cambio, sea por exceso, o por dañado.

PREGÚNTATE:

¿Cumple esta área, espacio, contenido, o contenedor, su función? ¿Qué sobra? ¿Qué falta? o ¿Qué distorsiona el conjunto? ¿Está roto o dañado?

iniciar el primer paso:

Intentarás sacar del campo visual aquello que te llamo la atención. Elige algo sencillo, que puedas hacer en pocos minutos, el resultado será más rápido. Hoy, solo queremos generar el poder del cambio, no una maratón.

Elige proceder en el vaciado de un espacio pequeño, muy visible. Agrupa los objetos restantes, por categorías, armonía cromática, por texturas, o formas. Esto te ayudará a aligerar visualmente el espacio, verás orden.

¿Te gusta el cambio? ¿Notas ese gusanillo del trabajo bien hecho? Seguro que no puedes dejar de mirar que bien ha quedado. Pues ese sentimiento de satisfacción, es el poder del cambio. Ahora aprovecha el entusiasmo y sigue adelante. Ponte un reto, cada semana, sigue y sigue…

EN RESUMEN:

Observar el espacio, ponerlo en cuestión, ya es un paso hacia un cambio. Cambiar de lugar, o retirar algo que moleste.

Ordenar un mini espació, por ejemplo un estante. Es el inicio que nos acerca a descubrir el poder de los pequeños cambios.

Cuando sientas que tu casa te agobia, te aburre, se vuelve monótona, intenta cambiar algo de sitio, genera cambio.

Término con una frase célebre:

“Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”. Albert Einstein.

Más claro imposible, si lo decía un genio, porqué no aplicarlo. Espero que esta idea para generar cambios en casa te sea útil. A mí me funciona.

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Saludos.

G.P

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